Archivo de la etiqueta: norma

REMORDIMIENTO por TONY (colaboración desde CP Estremera)

remordimiento

El remordimiento, y en ello suelen coincidir casi todos los moralistas, es un sentimiento sumamente indeseable. Si has obrado mal, arrepiéntete, enmienda tus equivocaciones en lo posible y esfuérzate por comportate mejor la próxima vez. Pero en ningún caso debes llevar a cambo una morosa meditación sobre tus faltas. Darse revolcones sobre una charca de fango no es la mejor manera de limpiarse.

También todos tenemos moral, yo tengo mi moral, y muchas de las reglas de mi moral son las mismas que las de la ética normal, o como poco análogas a ella. El remordimiento, por ejemplo, para mí es tan indeseable como lo son los errores que lo fomentaron en relación con mis malas acciones. En un futuro, mi maldad debe ser reconocida por mí mismo y, en lo posible, tratare de evitarla. Arrepentirme de los errores cometidos hace veinte años, intentar enmendar un acto fallido para darle la idoneidad que no logré en su momento, perder los  años de madurez en el intento de corregir los pecados que cometí y legados por aquella persona ajena que fue uno mismo en mi juventud, todo ello, sin duda, es vano y fútil. Mis defectos como persona son más que considerables, para poder corregirlos debería volver atrás en el tiempo, como el hombre que ahora soy, como otra personas que soy, y probablemente hubiese soslayado no sólo algunas faltas cometidas, sino también algunos de los méritos que poseyera originalmente. Aún así, resistiéndome a la tentación de revolcarme en los remordimientos, prefiero dejar tal como está lo bueno y malo de mi imperfecto pasado y tratar de concentrar mis esfuerzos en no volver a equivocarme y tratar de crecer como persona, a pesar de que quizás por variadas circunstancias, a menudo pienso que ya es demasiado tarde, que mi tiempo se agotó para tal propósito.

Otras, sin embargo, creo que merece la pena, al menos enmendar como poco los defectos más graves para quienes me rodean y para mí mismo.

Quizá existan, se me presente u ofrezcan múltiples alternativas, pero claras solo soy capaz de ver dos con cierta seguridad: llevar una vida insensata basada en una utopía o por el contrario que esa vida sea más humana, asumiendo mis errores en muchos aspectos, pero en otros casi la siento igual de extravagante y anormal.

Tony